Un concierto abrasivo, intenso y un grupo con las ideas muy claras de lo que querían transmitir y un sonido casi perfecto.

Ayer TAB sonaron como unos Jesus&Marychain con ganas, como, My Bloody Valentine pasados de speed o como Surfin Bichos pasados de speed y con ganas.

Punk es una actitud: 45 minutos de concierto, sin pausas entre canciones, la guitarra volando arriba y abajo, sin bises, ni siquiera se despidieron... En otro grupo quizás resultaría arrogante, pero a mi me pareció el mejor final para una locura de distorsion llevada a cabo por unos shoegazers que nunca dejaron de mirar a los ojos del público.