Ver a Depeche Mode es tener un espectáculo seguro, porque, entre otras cosas, todos sabemos que Dave Gahan es el más macarra de todos que se toca el paquete como nadie. Una espera con ganas el "Personal Jesus" o "Enjoy the Silence" y las tocan. Rock oscuro que sale de la herida "Never let me down", de las visceras "Walking in my shoes", del sexo "I Feel You", esto suena un poco típico, pero es que es verdad, y luego está Martin Gore con sus momentos guitarra-piano que te quedas como la seda.

Una apuesta el sábado por un buen concierto en el velódromo de Anoeta y no pierde.

Mi madre, que así lo presentía, va y me invita para ir juntas, para dar un gusto a su hija y para rejuvenecerse ella, según su argumento. "Hombre, hubiese preferido ver a los Rolling, pero estos son tan conocidos como los U2, no?" decía, "pero mejores, ama, mejores" le digo yo. Como en aquel anuncio de mastercard yo diría algo así como: "ver la cara de satisfacción de tu madre y disfrutar con ella en un concierto de Depeche Mode, no tiene precio".

Un beso mami, por guapa y por rockera.

*********************************************************
Y suena "Anyone can play guitar" de Radiohead, perfecto.

**********************************************************